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La investigación científica en el área de la química
Un desarrollo de la UNRC para economizar la producción de microchips

Un reciente descubrimiento realizado en la Facultad de Ciencias Exactas podría ser aplicado en la industria informática para la fabricación de microchips, o en la industria automotriz para producir pinturas antiestáticas en los automóviles.

Los chips de las computadoras se hacen mediante la fabricación de un patrón de la figura que uno quiera mediante la utilización de cobre (eso sería un circuito impreso con cobre como conductor). 
Horacio Salavagione, a través de su trabajo de investigación “Desarrollo de métodos sintéticos para modificación de polímeros conductores”, propone que los circuitos se hagan mediante la utilización de la polianilina y que luego, arriba se le deposite el cobre, ya que es un método mucho más económico.
La polianilina es un material que se usa en baterías recargables, pero tiene potenciales aplicaciones a futuro, por ejemplo en microelectrónica, en formación de circuitos impresos, en dispositivos de pantallas planas, en censores, entre otras cosas.
“El problema que tiene la polianilina, polímero con el que yo trabajo, es que no se puede disolver, entonces manejarlo como sólido es un poco complicado. Lo que yo hice fue ponerle a la polianilina grupos modificantes que lo puedan hacer solubles” comenta el Licenciado en Química”.
Según Salavagione, hay básicamente tres métodos para hacer soluble la polianilina: uno es mediante posmodificación, el otro es la omopolimerización de derivados sustituidos y por último, está la copolimerización.
“Mediante dos de estos métodos (posmodificación y copolimerización) obtengo polímeros modificados que se pueden disolver y por tanto son procesables y cuando vos lo querés fabricar algo o irte a la industria lo puede manejar más fácil”, explica el Químico.
Al ser soluble (mediante el ácido Aminovenzoico) ahora es más procesable, lo que sucede que muchas veces para hacerlo procesable se pierden algunas propiedades conductoras que son las interesantes, entonces hay ahí una situación de compromiso entre: cuánto se puede disolver y cuánto afecta a las propiedades. 
A pesar de numerosas investigaciones realizadas por empresas que están a la vanguardia en la producción de materiales vinculados a la opto electrónica y microelectrónica, nadie antes hasta este estudio había logrado introducirle al polímero el grupo adecuado para conferir solubilidad sin hacer que pierda las propiedades conductoras.
Salavagione realizó las reacciones de posmodificación y una vez que obtuvo el polímero nuevo, comenzó a hacer aplicaciones tecnológicas, es decir, depositó patrones de polianilina usando la polianilina modificada que se llama Polianilina Nitrozada.
El problema que se presenta para realizar una producción en masa es que hay que minimizar el tamaño, ya que por cuestiones técnicas todo fue realizado a escala centímetros, por lo tanto hay que llevarlo a tamaños más pequeños. De esta manera, el polímero reducido a escala milimétrica se puede producir en masa. “Un rector de un litro producís aproximadamente 20 gramos de polímeros y obtenés una cantidad enorme de microchips para varios años de producción” expresó Salavagione.
 


Horacio Salavagione
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