Editorial

¿Podremos sobrevivir a la tecnología?
Johannes Von Neumann

“El progreso tecnológico hace 
que las clases sociales se 
distancien  cada vez más: hay un grupo social que jamás va a acceder al progreso. Son gente que persigue algo muy básico: comer todos los días. Los 
humanos somos reticentes a los cambios del medio ambiente. 
Si bien se supone que buscamos mejorar la calidad de vida, 
podemos vivir en casi cualquier medio ambiente mejore o no mejore nunca. No podría decir si está bien o mal. A mi 
me pone triste porque es seguir viviendo, pero con menos 
dignidad” 
Tsai Ming 
Director y actor de cine malayo

Históricamente el hombre ha buscado elevar la calidad de sus condiciones de vida. El camino que se le presentó más prometedor fue el de desarrollar nuevos, crecientes y mejores conocimientos sobre el mundo en que vive y se desenvuelve, no solo para conocerlo, sino para dominarlo más eficazmente y modificarlo en su beneficio.

La ciencia, el conocimiento científico y la tecnología que se derivaron, tuvieron un portentoso desarrollo llegando a calar profundamente en la sociedad por lo que actualmente atraviesan toda la vida humana, convirtiéndose en parte indisoluble de la civilización moderna.

El principal aspecto que surge al abordar este tema es el efecto que tuvo la tecnología en la configuración del modelo de sociedad actual y el que tendrá sobre la sociedad futura. 

En el marco de relación existente entre sociedad, ciencia y tecnología hoy ya no existe el sentido de armonía entre hombre, naturaleza y sociedad porque se produjo una ruptura de ese equilibrio que derivó en una profunda modificación del ambiente tanto que llegó a convertirse en uno de los problemas más grandes de la humanidad. Pero también es a la vez una de las más grandes esperanzas.

El conflicto se origina, como dice Esther Díaz en “la comprobación de que la ciencia, a partir de sus aplicaciones tecnológicas produce salud, confort, excelencia. Pero también destrucción”.

La singular potencialidad, densidad y propia complejidad del tema convierte al dossier de este número de Voces, en un riquísimo encuentro de reflexiones, propuestas, alternativas y perspectivas, así la innovación tecnológica no solo se mira desde la realización material y diseño de instrumentos, aspecto con el que más impacta la tecnología, sino que incluye la reflexión filosófica sobre sus alcances al estar involucrado el destino social y trascendente del hombre. 
Y no se descuida el campo popular ya que el hombre, desde su habitat y desde las condiciones disponibles, da sus 
propias respuestas tecnológicas para sostener y mejorar su vida y la de su comunidad.

Incorporamos en el cuerpo otros temas estrechamente ligados al Dossier, que complementan el conocimiento y abren perspectivas sugerentes para ser tenidas en cuenta.

En “Antonio Rosmini, su pensar orante”, Calixto Camilioni retoma las fuentes y rescata el gran capital que posee el hombre: su capacidad de pensar y orar. Desde Italia, Jules Lucton, muy cercano al pensar rosminiano desde una mirada filosófica esboza, a grandes rasgos, el desafío del desarrollo de la ciencia.

Como el mundo no es sinónimo de homogeneidad, Luis Weinstein desde Chile, plantea una visión alternativa del desarrollo que opta claramente por los seres humanos por sobre las cosas y reclama por la libertad creativa del hombre.

En “130 años de ciencia mundial: ¿y nosotros aprendimos algo?”, Vicente Pleitez desde Brasil, reflexiona sobre los costos ocultos que implica para los países subdesarrollados, la adquisición más lenta y diferencial de los progresos tecnológicos.

A 200 años del nacimiento del Dr. Dalmacio Vélez Sarsfield ocurrido en la localidad de Amboy, Pcia. de Córdoba, se refleja su historia y el entorno de la comunidad que lo vio nacer.

El Maestro Eduardo Falú es uno de los nueve Doctores Honoris Causa de la UNRC, distinción que le otorgó nuestra universidad por ser un verdadero cultor y difusor de la música folklórica 
argentina. Falú postula que “salvar la cultura equivale a salvar al hombre,  como uno de los modos para que el país no se estanque”.

Con la novedad que VOCES cuenta con Registro de la Propiedad Intelectual e inscripción en el ISSN, nos despedimos hasta el próximo número, cuyo dossier dedicaremos a Inmigración.

Participan en este número:
Camilioni, Calixto; Lucton, Jules; Weinstein, Luis; Pérez, Tristán; 
Pelitez, Vicente; Florio, Nicolás; Fukuyama, Francis; Dean, Raúl; Montenegro, Raúl; Campos, Daniel; Brito, Héctor; Núñez Martínez, Oscar; Alemán Pérez, Reinaldo; Sisteró, Roberto; Rotman, Valeria; Quiroga, Sergio; Calvi, Germán; Becerra, Víctor.  

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