Vanesa Yanina Moretti, Alicia Viviana Zalazar
Directora: Lic. Ana Vogliotti.
El Objetivo que orientó nuestro trabajo final de Licenciatura
en Psicopedagogía fue: abordar una temática que pudiera vincularse
con el rol que desempeña el Psicopedagogo en el ámbito de
la institución educativa.
Desarrollamos este tema en forma teórica, tomando los
aportes de diferentes autores que han abordado la formación docente
y el rol del psicopedagogo desde distintos enfoques.
Abordamos la intervención psicopedagógica en el ámbito
institucional porque consideramos que es este contexto uno de los lugares
en el cual el psicopedagogo puede intervenir para promover la formación
teórico-pedagógica, la actualización y el perfeccionamiento
permanente de los docentes.
Nos centramos en el rol del psicopedagogo en la formación docente,
desde una perspectiva crítica y preventiva, por concebir a la docencia
como una estrategia de prevención tendiente a eliminar o disminuir
el riesgo de aparición en los alumnos y maestros de posibles perturbaciones
en los procesos de enseñanza y de aprendizaje que se desarrollan
en la escuela. Así, el psicopedagogo promueve y previene el aprendizaje
de los actores educativos.
Con respecto a la perspectiva elegida dentro de los modelos de formación
docente, consideramos que el enfoque crítico puede plantearse como
un modelo alternativo al modelo normalista y al eficientista que constituyen
la perspectiva hegemónica en la formación docente. Es esta
perspectiva crítica la que erige al docente como un intelectual,
productor de conocimiento, capaz de reflexionar sobre la cotideanidad de
su propia práctica, es decir, sobre las teorías y supuestos
pedagógicos que guían su accionar en el contexto del aula.
Es através de esta reflexión crítica como el docente,
conociendo su propia práctica, puede plantear alternativas de intervención
pedagógica para favorecer procesos de aprendizaje significativos.
A partir de este desarrollo teórico elaboramos una propuesta
concreta de formación pedagógica, tomando como modalidad
de trabajo la conformación de talleres de reflexión docente,
en los cuales el grupo desempeña un papel fundamental. En estos
talleres el rol que desempeña el psicopedagogo es el de coordinador,
poniendo a los docentes en situaciones de aprendizaje que permita a los
mismos la transformación y resignificación de las teorías
implícitas y su confrontación con las teorías científicas
para construir nuevas concepciones sobre educación y la promoción
de aprendizajes significativos en el aula.
Referencia bibliográfica
Matteoda, MARIA CELIA Y ALICIA VAZQUEZ DE APRA 1990 Concepciones
infantiles acerca del sistema de representación ortográfica.
Temas de Psicopedagogía IV: 77-94
Lilia Andrea Borda
Directora: Lic. Liliana Moyetta de Rinaudo
Los objetivos del presente trabajo son, por un lado, conocer si el juego,
actividad amplia en la que el niño se implica desde lo afectivo,
lo cognitivo y principalmente desde el punto de vista interactivo o psicosocial,
puede ser considerado un contexto para el aprendizaje. Y, por otro lado,
averiguar la posición del Nivel Inicial en relación al juego
(cómo es considerado, qué lugar ocupa en la jornada escolar,
cómo y con qué fines es utilizado, si el docente interviene
y para qué lo hace) para diseñar, en base a lo observado,
alguna estrategia de intervención didáctica que tome como
eje central al juego.
En la investigación bibliográfica sobre el tema se toman,
principalmente, los aportes de Brofenbrenner (1987) quien define y caracteriza
lo que es un contexto de desarrollo y de aprendizaje. De acuerdo a esa
caracterización el juego puede ser considerado un contexto pues
es una actividad molar, en tanto posee un significado y un momento determinado
en la cual se dan complejas estructuras interpersonales (díadas,
tríadas) en las que se refleja la reciprocidad en las acciones que
se complementan e influyen mutuamente. Además, se representan roles
adultos lo cual conlleva un intercambio constante de ideas y se crean contextos
mentales y desplazados (Edwards y Mercer, 1988) con respecto al contenido
del juego y a los planes de acción que se llevan a cabo en los que
proyectan sus ideas y concepciones, compartiéndolas.
Se ha analizado qué sucede en el Nivel Inicial, desde dónde
se valoran las actividades lúdicas y qué relación
se establece entre el juego y el aprendizaje de los niños. Con este
propósito se han realizado observaciones en 4 salas de Jardín
de Infantes de dos instituciones de la ciudad de Río Cuarto. Se
toman para el análisis las actividades realizadas dentro de la sala,
clasificadas en: observaciones en las que aparece juego espontáneo
(26) y observaciones en las que aparece una actividad pedagógica
(34). Esta clasificación tiene la finalidad de comparar qué
sucede en ambas situaciones tomando en consideración algunas categorías
relacionadas con la intervención docente, interacciones entre los
niños y con la docente, establecimiento de contextos mentales y
desplazados, tipo de juego predominante, etc.
El tratamiento de los datos obtenidos se enmarca en un estudio de tipo
cualitativo descriptivo, porque a pesar de realizarse también un
análisis cuantitativo, el mismo está dirigido a comprender
las situaciones singulares sin buscar establecer generalizaciones válidas
para otros contextos.
Los resultados obtenidos en la comparación entre las actividades
lúdicas y las actividades pedagógicas diseñadas en
función de un objetivo específico, hacen observables algunas
diferencias importantes entre ambas evidenciando la importancia del juego
como espacio insustituible para el niño, no sólo por el placer
que le produce jugar sino por las posibilidades de interacción con
sus pares y con adultos (capaces de jugar), de ponerse en el lugar de otro
mediante la adopción de un determinado papel, de conocer y aprender
cosas nuevas a través de la situación misma. La actitud lúdica
del adulto es fundamental para conocer a los niños y la situación
de juego que están desplegando para luego poder intervenir con el
fin de optimizar los procesos cognitivos y relacionales que se desarrollan
en el mismo.
Es por ello que se plantea la necesidad de otorgar un espacio en el
que los niños y ¡no sólo los niños! puedan desplegar
sus juegos y en ellos aprender a través de la misma interacción.
Pero, además, resulta interesante la posibilidad de pensar al juego
como una estrategia didáctica factible de ser aplicada, tomando,
por supuesto, los recaudos necesarios para que éste no pierda su
carácter de tal.
Referencias
Brofenbrenner, U. 1987 La Ecología del Desarrollo Humano. Experimentos
en entornos naturales y diseñados. Paidós. Barcelona.
Edwards, D y N. Mercer 1988 El Conocimiento Compartido. El Desarrollo
de la Comprensión en el Aula. Paidós MEC Barcelona.