Retorna a página principal de Hoja Aparte

 
El impacto del recorte en la ciudad y la región 

Se sabe, la situación de la Universidad Nacional de Río Cuarto es apremiante debido al recorte presupuestario dispuesto por la Ley de déficit cero. Si bien, el primer reajuste del 13% aplicado sobre los haberes de julio del personal docente y no docente fue cubierto por la propia institución con fondos propios, no sucederá lo mismo en los próximos meses. En consencuencia, el impacto de la reducción de partidas tendrá un efecto negativo, no solo para los integrantes de la propia casa de estudios, sino también para el movimiento económico de la ciudad.

El presidente del Centro Empresario Comercial, Industrial y de Servicios fue categórico al evaluar el nuevo panorama presupuestario educativo. Hugo Minod, dijo a Hoja Aparte que «la Universidad local es la empresa que mayor cantidad de interéses económicos produce en Río Cuarto». El dirigente consideró que es preocupante la situación que debe afrontarse porque «el impacto que puede traer acarreada esta reducción presupuestaria seguramente se verá reflejado en nuestros sectores de comercio y servicios». Acotó que «al existir una menor disponibilidad en el espectro de la comunidad universitaria, que prácticamente consume de todo en la ciudad, habrá una incidencia directa en el movimiento económico local». Minod concluyó en el impacto negativo que representará para el sector empresario una baja en los montos asignados a la UNRC. Esa circunstancia significará «una agresión más» para las alicaídas posibilidades comerciales del sector en la ciudad, sentenció. 
Como se recordará, meses atrás la conducción universitaria publicó un informe que daba cuenta del movimiento económico directo e indirecto que genera esta casa de altos estudios en la actividad de la ciudad. Más de 70 millones de pesos anuales igresan a circuito de consumo local por la sola actividad de la institución. 37 millones de presupuesto asignado para su funcionamiento y los haberes de su personal, más otros 25 que produce complementariamente el movimiento de alumnos, la realización de múltiples eventos, el financiamiento de proyectos de investigación y extensión, entre otros conceptos. Si se afectan las partidas oficiales mediante la aplicación de recortes, se afecta seriamente el desarrollo de la ciudad.

Desde la región
Los integrantes de la Asociación para el Desarrollo del Sur estuvieron reunidos días atrás para analizar, entre otros aspectos, la situación que atraviesa nuestra universidad debido a las nuevas restricciones presupuestarias y las posibles cosecuencias que ello producirá en el área de influencia. Los intendentes de la región coincidieron en que se debe «valorar a esta institución educativa como ámbito donde no solamente se discuta en términos teóricos, sino que también tome la impronta de buscar modelos alternativos y soluciones a las crisis». El presidente de ADESUR, Juan Otamendi, dijo que «las Universidades Nacionales del pais deben pensar de modo conjunto la manera de rsistir para que no nos vendan recetas extranjeras».
Como se dijo, por ahora la aplicación de la Ley de déficit cero determinó la reducción del 13% de las partidas destinadas al sistema universitario. Para el caso local, con su consecuente ejecución sobre los haberes del personal, representará que en este segundo semestre del año más de dos millones de pesos dejen de ingresar no sólo a los hogares de los docentes y no docentes de la Universidad, sino también al recesivo mercado de la ciudad. 
Desde el área de Desarrollo Económico y Producción de la Municipalidad local, el subsecretario Jorge Hernández, se explayó sobre las nuevas condiciones de prducción que se alcanzarían en la ciudad y la región con una Universidad en crisis, debilitada presupuestariamente. «Está claro que la UNRC conforma un elemento de desarrollo importante para el sur provincial», disparó el funcionario. 
Enseguida, desde una perspectiva técnica del desarrollo, evaluó a Hoja Aparte que «a pesar de contar con un mercado acotado, en Río Cuarto aún existen posibilidades de reducir los costos para la instalación de proyectos productivos. En este escenario, la Universidad aporta conocimientos y calificación de recursos humanos esenciales, sin los cuales se perderían importantes ventajas competitivas». 
Explicó que la Universidad da sentido a los atractores locacionales. Estos constituyen las condiciones que determinan que algunos emprendimientos se instalen en una localidad o zona. Las universidades nacionales generan instrumentos que pueden fundamentar la ubicación de atractores para el desarrollo de proyectos. «Por eso -enfatizó Hernández-, es sustancial contar con una Universidad fuerte, abocada de lleno a la actividad educativa y a la producción de conocimientos».  
Desde puntos de partida diferentes, la mayoría de los sectores institucionales está consustanciado con la Universidad Nacional que vio nacer (y peleó) hace 30 años. Hoy, esa Universidad cuenta con un ganado reconocimiento en los más diversos ámbitos de la sociedad. Pero por la insensatez de las políticas de turno, afronta una crisis difícil de digerir. Una vez más, Universidad y comunidad seguro podrán recuperar algún espacio perdido. . 

Escríbanos y envíe
sus sugerencias y
comentarios
a nuestro e-mail
Página Principal de la UNRC