Marta Maffei, secretaria general de la CTERA, que intervino en un panel  sobre «Encuentro para la defensa de la educación pública», el viernes en el campus, junto a Pedro Sanllorenti, secretario adjunto de CONADU,  sostuvo que «la pobreza y la exclusión son factores de los que derivan la deserción escolar, el fracaso y la violencia social».

«La Argentina -dijo Maffei- abandonó el estado protector, el que está a favor de la gente, para cumplir el rol de árbitro ante distintos sectores de la sociedad, y viene jugando para desbalancear a favor de los pobres y los excluidos».
La dirigente, que fue presentada al igual que Sanllorenti por el secretario general de la Universidad, Juan José Busso, habló en el aula magna del pabellón del Rectorado del campus universitario ante docentes, alumnos, dirigentes del CTA Río Cuarto y del Frente Nacional contra la Pobreza (FRENAPO), así como del Polo Social.
«En la Argentina -agregó- quienes gobiernan nunca fueron los militares ni hoy son los políticos; siguen siendo los grupos económicos que conducen el país y utilizan en algún momento a los militares y en otros a los políticos, y son los que conducen los destinos de la Argentina, en favor de la acumulación de la riqueza y de la concentración en pocas manos».
«Es necesario -señaló- entrar en un camino de democratización de la cultura, de los bienes, de los recursos y de la moralización de las relaciones sociales y humanas, donde la ética sea parte de las relaciones entre las personas».
«En esta situación -añadió-, en la que muchos hemos perdido mucho y casi todos hemos perdido una parte, pienso que los estudiantes universitarios, los docentes universitarios, en general la gente de la cultura, tenemos algunas cosas a favor más allá de la falta de recursos económicos».
«Tenemos el conocimiento -enfatizó Maffei-, tenemos herramientas, las podemos usar. Tenemos la capacidad de llegada a millones de personas, tenemos menos desprestigio que el conjunto de los políticos y otros sectores de poder».
«En fin -destacó- creo que tenemos herramientas como para ayudar». «Acá no alcanza con resistir -dijo luego la dirigente docente nacional-. La resistencia es el punto de partida; sin resistencia no hay construcción de alternativas, pero si nos quedamos en la resistencia no va a alcanzar. Por eso, me parece que sirve el intercambio para ir generando caminos de alternativa»..