Presentan “Bolivia”en el ciclo Cine y Universidad
La cátedra de Sociología del Departamento de Educación
de la UNRC ha informado que el día jueves 15 de agosto de 2002 se
dará inicio al decimoprimer año consecutivo del ciclo «Cine
y Universidad». En esta oportunidad se proyectará el film
«Bolivia», del director Adrián Caetano. Como siempre,
la cita será en el Colegio de Arquitectos, Colón 420, desde
las 20 con entrada libre.
Bolivia
Hay realizadores que desde su primer cortometraje muestran un universo
temático y un estilo definitivamente personales. Es el caso de Caetano,
quien a lo largo de su filmografía ha desarrollado una mirada descarnada
y escéptica sobre la vida cotidiana, que para sus protagonistas,
generalmente marginales, se transforma en un infierno sin salida. Esto
se podía apreciar cabalmente en dos obras mayores como el mediometraje
La expresión del deseo y Pizza, birra y faso, sin que en este último
la presencia de Bruno Stagnaro en la codirección atenuara un ápice
esa desencantada visión. Bolivia se desarrolla casi íntegramente
dentro de un bar barrial de mala muerte, donde se reúnen una serie
de personajes cuyo único objetivo vital es la supervivencia a cualquier
costo, y ese ámbito físico excluyente en el que transcurre
la acción provoca que el film sea aun más opresivo y claustrofóbico
que sus trabajos anteriores. Enrique Liporace, como el encargado del bar,
tiene aquí el papel de su vida.
Bolivia se inicia de modo revelador: un diálogo entre futuro
empleador y empleado mientras la cámara va entregando planos breves,
casi inserts, típicos –la foto de Gardel, detalles del mobiliario,
del mostrador, un televisor encendido, instrumentos de trabajo– de una
parrilla casi céntrica de Buenos Aires. Será éste
el espacio privilegiado que, explorado así inicialmente por la vía
del tópico visual instantáneo, el relato desplegará
casi exclusivamente durante su breve transcurso, pequeña máquina
narrativa de una institución urbana que, además de los consabidos
toques de color local (no ya complacientes, como es la regla en nuestro
cine, sino teñidos más bien de cierta ominosidad), introduce
la idea de violencia contenida ya desde un principio.
En el ámbito estrictamente cinematográfico ciertas instancias
son valiosas en el film, asociadas sobre todo a los intérpretes
y a la construcción de algunos de sus personajes. Asimismo, asoman
en Bolivia algunos motivos o resoluciones importantes: un esbozo de variaciones
sobre el tema de la lucha por el control remoto del televisor; la duplicidad
de la institución policial, escindida en una cara nocturna y otra
diurna, o incluso, el carácter tácito de la escena final
de la pensión, con Rosa como espectadora muda que presagia una mudez
futura ante los poderes. |
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