ALERGIAS:
CÓMO Y POR QUÉ SE MANIFIESTAN
Estornudos abundantes, ojos irritados, picazón en la garganta,
goteo constante de la nariz, son algunos de los síntomas que se
ven -y sufren- tan a menudo en estos días. Las actuales condiciones
climáticas, al ambiente seco y ventoso, han potenciado estas molestias
en las personas alérgicas al punto de disminuir su calidad de vida.
Más allá de las condiciones adversas, se estima
que aproximadamente entre un 10% y un 15% de la población padece
de algún tipo de enfermedad alérgica, porcentaje que aumenta
día a día en todo el mundo.
La alergia, se define como una «sensibilidad anormal a una sustancia
que es generalmente tolerada y considerada no dañina». Esta
sensibilidad a materias extrañas es común en cualquier organismo:
nuestro sistema inmunológico actúa como una barrera de defensa
frente a innumerables sustancias que se encuentran presentes en el aire
que respiramos, en la comida que ingerimos y en las cosas que tocamos.
Sin embrago, la alergia es una reacción de defensa “exagerada” que
provoca daños o inflamaciones en nuestro organismo.
La mayoría de estas reacciones son el resultado de un sistema
inmunológico que responde a una «falsa alarma.» Cuando
una sustancia no nociva tal como el polvo, el moho, o el polen entran en
contacto con una persona que es alérgica a esa sustancia, el sistema
inmunológico puede reaccionar espectacularmente, produciendo anticuerpos
que «atacan» la sustancia y desencadenan una cascada de eventos.
Por qué se produce la reacción alérgica?
El mecanismo por el cual el sistema inmune nos ayuda a defendernos
contra los materiales extraños es la producción de millones
de anticuerpos diferentes (también llamados inmunoglobulinas). Cada
anticuerpo tiene la habilidad de reconocer y unirse a una sustancia extraña
específica y única. Los anticuerpos circulan en la sangre
y están presentes en casi todos los líquidos corporales donde
ayudan a «capturar» y prevenir la entrada de materia extraña
no deseada.
Existen cinco clases de anticuerpos, entre ellos se encuentra la inmunoglobulina
E (IgE). Cuando una persona susceptible se expone a un alergeno, el cuerpo
comienza a producir una gran cantidad de los anticuerpos IgE correspondientes.
La próxima exposición al mismo alergeno puede producir una
reacción alérgica. Los síntomas de una reacción
alérgica variarán dependiendo del tipo y la cantidad de alergeno
encontrado y en la manera en la que el sistema inmunológico del
cuerpo reacciona frente a ese alergeno.
Se llama alergenos a las sustancias del medio ambiente responsables
de las reacciones alérgicas. Los ácaros, los hongos de la
humedad, los pelos de animales domésticos, los cambios de tiempo
y temperatura son los alergenos más comunes. Sin embargo, aún
no se tiene conocimiento pleno del porqué algunas sustancias son
alergénicas y otras no, ni tampoco porqué no todas las personas
desarrollan una respuesta alérgica después de la exposición
a alergenos. Existen evidencias de una fuerte contribución genética
en las enfermedades alérgicas.
Tipos de alergias
Las alergias se pueden presentar en una infinita variedad, pero las
podemos agrupar en tres grandes categorías: alergias por contacto,
alergias por alimentos y alergias por inhalación. Las alergias pueden
también ser causadas por aspectos genéticos que hacen incompatibles
ciertas sustancias con nuestro organismo. Las enfermedades alérgicas
más comunes son la Rinitis alérgica, la Conjuntivitis Alérgica,
la Dermatitis, el Asma y la Alergia a alimentos.
Ante la aparición de los primeros síntomas de la alergia,
se aconseja consultar al médico y hacer un buen diagnóstico
respecto del tipo de enfermedad, sus causas y desencadenantes. En algunos
casos la enfermedad no puede curarse totalmente pero pueden controlarse
los síntomas con una medicación adecuada, disminuyendo la
exposición a los alergenos y con tratamientos de vacunas.
Fuentes: Redalergia.com - Dospu - www.lafacu.com
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Cómo identificar la alergia
Conocer los síntomas alérgicos más comunes
puede ayudar a un diagnóstico precoz y a un tratamiento adecuado,
evitando así complicaciones e idas y vueltas innecesarias.
Cuando la alergia se manifiesta a nivel nasal, los síntomas
son:
· picazón en la nariz, en la garganta y a veces
en los oídos,
· lagrimeo, picor en los ojos,
· muchos estornudos, a la mañana o cuando cambia
la temperatura,
· secreción nasal transparente, que cae como agua,
· congestión nasal y sensación de nariz
tapada.
A nivel de los bronquios:
· falta de aire y agitación,
· tos seca y luego catarral,
· silbidos en el pecho.
Cuando la alergia se muestra en la piel:
· ronchas sobreelevadas y enrojecidas,
· picazón,
· hinchazón de labios y ojos,
· eczema en el cuello, codos y/o detrás de las
rodillas.
Cuando se manifiesta en el aparato digestivo:
· náuseas y vómitos
· diarreas, cólicos,
· constipación.
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