Se construye un laboratorio para mejorar
las condiciones de trabajo
La UNRC experimenta con energía solar para
calentar agua y producir electricidad
El Grupo de Energía Solar de la Facultad de Ingeniería
de la Universidad impulsa proyectos de investigación para
emplear tal energía en secado de granos, cocinas solares, calentamiento
de agua y su conversión directa en electricidad a través
de paneles solares.
Los trabajos adquieren importancia por la significación
económica potencial y su futura aplicación industrial tanto
en la región cuanto en el resto del país.
El ingeniero Jorge Barral, director del equipo de investigación,
dijo que los proyectos tienen diversos grados de avance y el proceso de
experimentación se consolidará con la construcción
de un laboratorio propio.
La Secretaría de Coordinación Técnica
y Servicios de la casa de altos estudios local, a tal efecto acaba de licitar
la construcción de la estructura básica de dicho laboratorio,
que será levantado en un predio adquirido por la Universidad para
experimentación ubicado frente al campus universitario.
Allí se hará montaje de equipamiento y se
instalarán los instrumentos de medición en la terraza debidamente
adaptada para realizar las mediciones solares.
El grupo de trabajo se constituyó hace ocho años
y hoy está integrado por seis profesores y nueve auxiliares, más
ayudantes de investigación de distintas carreras.
Cocina solar
Barral expresó que ya se han construido cocinas solares de varios
tamaños, que se han probado para cocer tortas, pan y asado, con
las que se han hecho demostraciones en comedores comunitarios, escuelas
y ferias de la ciencia.
La cocina solar básicamente es una caja con aislación,
que a través de una superficie transparente concentra y acumula
energía calórica en su interior, que se usa para hacer distintas
comidas.
Otro proyecto es el de los colectores solares para calentamiento de
agua de uso residencial.
«Es difícil competir en la ciudad -advirtió
Barral- porque se emplea el gas natural que es de fácil acceso y
bajo costo, pero es útil la experimentación del proyecto
con mira a empleos en lugares aislados o donde hay sólo gas envasado
u otros medios de calentamiento, en cuyo caso desaparece la competencia
económica».
En este tipo de proyectos que está en etapa experimental
«hay que hacer una inversión inicial en equipos, aunque se
recupera en unos siete años», afirmó.
«Este proyecto -advirtió Barral- cuenta con
subsidios de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad
Nacional de Río Cuarto, desde 1994 a la fecha, y también
nos subsidia la Agencia Córdoba Ciencia».
El proyecto de investigación se encuentra
en etapa de experimentación y se están haciendo tratativas
con una pyme para la construcción de un prototipo.
Otra rama de la investigación en energía
solar con futura aplicación es la del secado de granos, en la que
trabaja un grupo de docentes con amaranto, grano de alto valor nutritivo
utilizado preferentemente en alimentos para niños.
Aplicación y premio
Recordó Barral que uno de los trabajos en que se obtuvieron
resultados prácticos fue el aplicado en los invernaderos de la Granja
Siquem, en el que se pudo proteger los cultivos de las heladas con un sistema
geotérmico.
Fue un proyecto sobre conservación de la energía.
Se usó agua subterránea de media temperatura para evitar
que se hielen plantas y detengan su crecimiento.
Por este proyecto del calentamiento de los invernaderos,
el Grupo de Energía Solar de la UNRC obtuvo un premio en 1998 en
un congreso en Bahrein.
La distinción fue por la naturaleza novedosa del
proyecto, denominado «Calentamiento geotérmico de invernaderos».
El Grupo de Energía Solar ha brindado servicios a terceros
como extensión para la utilización de sistemas fotovoltaicos
para una empresa tucumana de energía eléctrica que le compró
a otra brasileña 39 equipos de paneles solares para escuelas.
El equipo hizo ensayos en base a normas IRAM y otras internacionales
de certificación de paneles, reguladores, de equipos y de ensayos
mecánicos.
Otro proyecto en experimentación es la medición
de las variables climáticas, o sea el procesamiento de datos del
clima, en los que se trabaja en conexión con otros centros de Mendoza,
Rosario y de otros lugares para hacer una cobertura del país en
cuanto a las variables climáticas.
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Ingeniero Jorge Barral, director del Grupo Energía
Solar.
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