Con la participación de más de 1200 personas de la ciudad y región se llevó a cabo la 146ª colación de grados de la UNRC. La presencia del público le dio un gran colorido a la ceremonia en el Anfiteatro General San Martín en una espléndida tarde otoñal. El acto académico fue presidido por el vice rector Oscar Spada y recibieron sus diplomas 152 nuevos profesionales.

  De los 152 títulos, 26 corresponden a graduados de la Facultad de Agronomía y Veterinaria, 22 a la Facultad de Ciencias Económicas, 35 a la Facultad de Ciencias Exactas, 62 a la Facultad de Ciencias Humanas y 7 a la Facultad de Ingeniería.
  En esta ocasión recibió el diploma Franco Lorio, primer egresado de la carrera de Ingeniería en Telecomunicaciones, que se dicta en la Facultad de Ingeniería.
  El vicedecano de la Facultad de Agronomía y Veterinaria, Aníbal Bessone, tuvo a su cargo uno de los discursos de la colación. Bessone advirtió que «es importante que Argentina invierta más en educación estatal y en ciencia y técnica, ya que un desarrollo sin conocimiento conduce al subdesarrollo».
El investigador y docente universitario pidió «trabajar para dar contención e inclusión social a la gran masa marginada» del país y «revalorizar a la educación pública e irrestricta y a la ciencia y técnica como engranajes fundamentales para buscar soluciones» en «la lucha para frenar la disgregación social».
   En el estrado también estuvieron decanos, vicedecanos y secretarios del Rectorado, mientras que junto a los egresados asistieron sus familiares y amigos, quienes los acompañaron en tan trascendente momento de su vida. Otro de los presentes fue el ex rector Alberto Cantero, quien hizo entrega del diploma al primer ingeniero en Telecomunicaciones de la Universidad, Franco Lorio.
   Durante la ceremonia también hizo uso de la palabra Carola Soledad Astudillo, flamante psicopedagoga. 

Conocimiento y sociedad
El vicedecano Aníbal Bessone reclamó «fortalecer el uso social del conocimiento» y alertó que «la mera existencia de un potencial científico y profesional no modifica las condiciones del subdesarrollo».
   Por eso, sostuvo  que «es necesarios que existan políticas de articulación entre los agentes económicos y sociales y los productores del conocimiento».

Agradecimiento
La psicopedagoga Astudillo habló en nombre de los egresados y agradeció a la Universidad y a las familias en general el apoyo brindado para hacer posible el alcance de la graduación.
   Señaló que «la deuda es grande no sólo con aquellos que han estado ahí, enseñando, apoyando, alentando; sino sobre todo con los que han quedado en el camino o no han tenido nunca la posibilidad de emprenderlo».

Homenaje
 Finalmente, Soledad  Astudillo rindió un homenaje a todos aquellos jóvenes que hace  22 años «marchaban a la locura de la guerra» a quienes les fueron «arrebatados los sueños y la vida».

Franco Lorio: primer Ingeniero en Telecomunicaciones
Franco Lorio, tiene 26 años, estudió y trabajó, fue presidente del Centro de Estudiantes de su Facultad y actuó como consejero directivo y superior de la Universidad Nacional de Río Cuarto.
   En el tiempo previsto, se recibió y es el primer ingeniero en Telecomunicaciones de la casa de altos estudios.
   «Hay que recomenzar todo de nuevo porque en la década de los ’90 se traía todo de afuera», recalcó Lorio al referirse al campo laboral.
   Admitió que «la Argentina en estos momentos está lejos de los países desarrollados, pero hay  un rebrote tecnológico en nuestro país porque cuenta con el recurso humano para lograrlo».
  «De todas formas, alcanzar un nivel en el campo tecnológico nacional acorde con los países de punta va a llevar esfuerzo de una década por lo menos», comentó el flamante egresado de la Facultad de Ingeniería. 

 

El acto de colación se extendió hasta las primeras horas de la noche  que  prestó una espléndido marco para la emotiva ceremonia de entrega de diplomas  a los flamantes graduados de la cinco facultades de la Universidad. 

El vice rector Oscar Spada entrega el diploma a una de las egresadas. 
 
 

11 mil títulos de grado en 33 años
de vida
Desde su creación,  ocurrida en 1971, en la Universidad Nacional de Río Cuarto recibieron sus títulos 11.018 profesionales, de los cuales un 50 por ciento se graduó en los últimos siete años.
  Las cifras vinieron creciendo de manera sostenida. En el año ’99 egresaron 633 personas; en el 2000, 728; en el 2001, 880; en el 2002 lo hicieron 1047 y el año pasado recibieron sus títulos 1056 graduados.
     En el último lustro, que representa el 15 por ciento de la vida académica de esta Universidad, lograron sus títulos de grado 4.496 profesionales, es decir el 40,80 por ciento del total.
  La Universidad forjó hombresy mujeres para beneficio de la región centro-sur de Córdoba y del país y su crecimiento fue permamente. 
Ofrece 52 carreras de grado, 16 de posgrado y desarrolla en la actualidad más de 160 programas y proyectos de investigación. 
  Tiene más de 20 mil alumnos efectivos y 1360 docentes, de los cuales 562 (41,32 %) tienen dedicación exclusiva. Sus actividades se desarrollan en una superficie cubierta de más de 66 mil metros cuadrados. El campus de 150 hectáreas se completa con dos campos de enseñanza, investigación y experimentación agropecuaria de 200 y 1.250 hectáreas.