La desocupación en el Gran Río Cuarto arrojó un dato alentador en el mercado laboral, al descender en un año el 4,7 por ciento. Hoy hay 3.307 desocupados menos, teniendo en cuenta datos que también comprenden a Las Higueras.

También se crearon 1550 nuevos puestos de trabajo, mientras que 1705 personas pasaron a la inactividad porque consiguieron un subsidio laboral o se jubilaron.
La información surge de comparar el último semestre de los años 2003 y 2004, medidos por un equipo técnico de la Secretaría de Extensión y Desarrollo de la UNRC para el INDEC. El número de personas sin trabajo bajó de 8880 a 5573, el menor número de desocupados desde el 1 de enero de 2003, en el que se operó un cambio de metodología en la medición.
En porcentaje, la desocupación bajó del 13,2 al 8,5 por ciento, cotejando los dos períodos mencionados.
La caída de la desocupación se compadece con la evolución positiva de la actividad económica en la ciudad, que en su momento suministró la Facultad de Ciencias Económicas a través del Indice de Evolución de Ventas.
Guillermo Rodríguez, coordinador del informe socioeconómico proporcionado, precisó que en el mismo período comparado se crearon 1.550 nuevos puestos de trabajo y que otras 1.705 personas pasaron a estar inactivas, tales como quienes obtuvieron un subsidio laboral o se jubilaron.

Subocupación
En los dos semestres comparados, la subocupación tuvo una leve suba con 236 personas más en esa condición, pasando de 8.025 subocupados en el último semestre de 2003 a 8.261 para igual período de 2004.
Estos datos están computados sobre una población general de casi 160 mil habitantes, dentro de la cual 65 mil personas corresponden a la población económicamente activa, de la cual a su vez alrededor de 60 mil tienen alguna forma de relación laboral, sea en la economía formal o informal.
Rodríguez señaló que hay en Río Cuarto 13.800 personas con problemas laborales.

Sustentabilidad
Rodríguez dijo que ahora «corresponde ocuparse de la sus-tentabilidad del trabajo, o sea de su calidad y de los derechos sociales que el trabajo debe garantizar». 
 

Guillermo Rodríguez, coordinador del informe.