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 Enfermedades
de transmisión sexual:
¿una
incidencia muy elevada?
Las enfermedades de
transmisión sexual en la actualidad conforman el grupo más
frecuente de enfermedades infecciosas de declaración obligatoria
en la mayoría de los países del mundo. Su incidencia es elevada
y se conocen más de 20 microorganismos patógenos que se transmiten
por contacto sexual.
La comprensión
de este tipo de afecciones ha tenido que esperar hasta que los avances
en microbiología permitieran el descubrimiento y posterior estudio
de los agentes causales.
Un equipo
de investigación de la Universidad, en forma conjunta con profesionales
del Hospital Central , está llevando a cabo un diagnóstico
etioepidemiológico de las enfermedades de transmisión sexual
(ETS), en Río Cuarto y zona de influencia. Se trata de un proyecto
de investigación realizado por las doctoras Lucila Barberis y Cristina
Pájaro, del Departamento de Microbiología e Inmunología,
de la Facultad de Ciencias Exactas.
Según este estudio,
«a pesar de ciertas fluctuaciones, la incidencia de las ETS sigue
siendo inaceptadamente elevada». Al ser consultada, la doctora
Lucila Barberis comentó que llevan estudiados más de mil
pacientes, entre mujeres y varones, en el marco de esta investigación,
que determina que si bien las ETS clásicas han disminuido, se registra
un marcado aumento de otras cuyo diagnóstico es más complejo.
Por otra parte,
el trabajo refleja que las personas de entre 20 y 29 años de edad
son las que tienen más posibilidades de adquirir una ETS, en lo
cual además influyen factores como la prostitución, la inestabilidad
familiar y los bajos niveles socioeconómicos, entre otros.
- ¿En qué
etapa se encuentra actualmente el diagnóstico de las enfermedades
de transmisión sexual que ustedes están realizando?
- Continuamos con la toma
de muestras, pero fundamentalmente estamos en el análisis estadístico
de los datos obtenidos, para conocer la prevalencia de cada una de las
enfermedades, y fundamentar una decisión racional para la prevención
y control de esas enfermedades en la población.
- ¿Qué
significa que se trate de un diagnóstico etioepide-miológico?
- El diagnóstico
etioepidemio-lógico consiste en realizar recolecciones sistémicas
de muestras de una determinada población, con el objeto de identificar
una infección por medio de la detección del agente causal.
- ¿Cuánto
tiempo hace que vienen trabajando en este emprendimiento?
- Desde hace tres años
estamos trabajando en el diagnóstico de las enfermedades de transmisión
sexual, llevamos estudiados aproximadamente mil pacientes femeninos y masculinos
que acudieron a la consulta médica por diversos trastornos genitales,
(presencia de flujo, comezón, ardor y disuria). Esto
ha disminuido, porque en el año 88 se hizo un estudio y los niveles
eran muy superiores. Pero encontramos un aumento considerable y la prevalencia
de uretritis y servicitis no gonococica.
En realidad, no sabemos
si estos resultados se deben a un aumento en la incidencia o es que han
mejorado las técnicas de diagnóstico para Chlamydia trachomatis
y micoplasmas urogenitales, que son uno de los agentes causales de estas
infecciones. La Chlamydia trachomatis es un microorganismo muy importante
causante de enfermedades de transmisión sexual, productor de una
cervicitis en la mujer y una uretritis en el hombre, pero que puede ser
sintomática o asintomática y puede llevar a la infertilidad
y causar embarazo fuera del útero.
¿Cuál
es el estado actual de la ETS en Río Cuarto y Zona?
- El estado o tendencia
actual en nuestro medio es de una disminución progresiva de las
ETS clásicas como gonorrea y sífilis.
Sin embargo,
las ETS hoy han ampliado su espectro e incluyen una gran variedad de microorganismos:
micóticos, parásitos, virales y bacterianos. En este estudio
se pudo observar que las enfermedades venéreas que han aumentado
son las producidas por chlamydia y micoplasmas urogenitales, agentes causales
de uretritis, cervicitis y salpingitis, entre otras. Un hecho para tener
en cuenta es que, a pesar de ciertas fluctuaciones, la incidencia de ETS
sigue siendo inaceptadamente elevada.
La sífilis
y la gonorrea son la ETS clásicas. En un primer momento, cuando
hablabamos de enfermedades de transmisión sexual nos referíamos
a gonorrea y sífilis, pero con el tiempo esas enfermedades clásicas
han disminuido y comienzan a surgir otras.
- ¿Por qué
resulta importante estudiar las enfermedades de transmisión sexual?
- Porque las ETS, en su
conjunto constituyen, a no dudarlo, un grave problema para la salud pública,
un serio peligro para la familia y una importante causa de invalidez física
y mental.
En general,
las ETS tienen consecuencias más graves para las mujeres y sus hijos,
que para los varones. En las mujeres las ETS cursan generalmente como infecciones
asintomáticas y, en general, la sintomatología es menos
específica; las pruebas de diagnóstico microbiológico
son menos sensibles y las mujeres infectadas presentan mayor riesgo
de sufrir las complicaciones, lo que en consecuencia puede ocasionarles
secuelas graves y permanentes, como infertilidad, cáncer de cuello
de útero y serias complicaciones para el feto y el recién
nacido.
- ¿Qué
agentes causales se conocen?
- Se conocen más
de 20 microorganismos patógenos que se transmiten por contacto sexual,
entre ellos hay bacterias, virus, hongos y parásitos.
- ¿Qué agentes
etiológicos y factores asociados a ETS se han encontrado?
- Los agentes encontrados
han sido los clásicos como el productor de la gonorrea (Neisseria
gonorrhoeae), el agente causal de la sífilis (Treponema
pallidum) y con mayor frecuencia los microorganismos causantes de cervicitis
y vaginitis (Chlamydia trachomatis, Mycoplasma urogenitales, Trichomonas
vaginales, Gardnerella vaginalis y Candida albicans).
Existen factores
asociados que inciden en que las ETS sigan propagándose, tales como
el desconocimiento por parte de la población en general y sobre
todo los grupos de riesgos; el menor temor a la peligrosidad de las enfermedades
venereas en general; la automedicación sin un diagnóstico
y control médico; cambios en la conducta sexual de la población,
con una iniciación sexual más temprana y aumento de la promiscuidad;
un control inadecuado de la prostitución y grupos equivalentes;
y por último la deficiente educación sexual de jóvenes
y adultos.
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