Hubo dos ceremonias en el Aula Mayor

La Universidad concretó una nueva colación a 168 años del paso a la inmortalidad del libertador San Martín

17 de Agosto de 2018 - Egresaron 98 profesionales. El secretario general de la UNRC, Enrique Bérgamo, despidió a los graduados y les pidió que, “desde sus lugares de trabajo, sigan defendiendo la educación pública”

En dos actos, se realizó este viernes la 265ª colación de la Universidad Nacional de Río Cuarto. El Aula Mayor fue el escenario de la entrega de diplomas a profesionales de las cinco facultades, en una fecha cara al patriotismo por cuanto se conmemoró el aniversario del paso a la inmortalidad de Don José de San Martín (Yapeyú, 1778-Boulogne Sur Mer, 1850).

En ambos actos, hizo uso de la palabra en representación de las autoridades el secretario general de la Universidad, Enrique Bérgamo.

Por los estudiantes, en el turno matinal habló la abogada María Margarita Bertolino, en tanto que por la tarde hizo lo propio el licenciado en Ciencias Biológicas Renato Marcos Pillón.

Las ceremonias, presididas por el rector Roberto Rovere, el vicerrector Jorge González, decanos y vicedecanos de las cinco facultades, contaron con la presencia de familiares y amigos de los graduados, que se sumaron al momento en que se coronan formalmente años de esfuerzo.

Recibieron diplomas 98 graduados: 21 de Agronomía y Veterinaria, 17 de Ciencias Económicas, 14 de Ciencias Exactas, 41 de Ciencias Humanas y 5 de Ingeniería.

Los actos

En una mañana de sol templada, el aporte artístico en el primer acto estuvo a cargo de la orquesta escuela de tango Fandango, del Conservatorio Provincial de Música Julián Aguirre, dirigida por el profesor Diego Seitz. Los acordes de La Cumparsita y La Yumba, entre otros, fueron premiados por el silencio atento y el aplauso cálido del auditorio, minutos después de un audiovisual que desde UniRío TV diera cuenta de aspectos salientes de la trayectoria de la casa de altos estudios. Por la tarde, actuó el dúo de piano y violín compuesto por los músicos Sebastián Olmedo y Nikolai Ott.

La salida de los músicos y el acceso de las autoridades al estrado fue amenizada por la Danza del gaucho matrero, que interpretó en piano el profesor Matías Targhetta, del Departamento de Arte y Cultura de la UNRC.

Banderas de ceremonia de la Universidad y facultades presidieron la colación, que tal como sucede habitualmente fue ocasión propicia para entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, ejecutado por Targhetta.

Bertolino: “Sí se puede cumplir los sueños”

La abogada María Margarita Bertolino expuso por la mañana en nombre de sus pares. En primer término agradeció, tanto “a todos los que estuvieron y me acompañaron” cuanto a la UNRC, “que me permitió lograr mi segundo título”. Desde su “pueblito del sur” y educada en una “familia humilde y trabajadora”, Bertolino transmitió el mensaje de que “sí se puede cumplir sueños y metas con dedicación”.

Al pasar revista por los años en el campus, recordó “alegrías y tristezas”, “momentos compartidos” y cómo “una meta que parecía inalcanzable” se hizo realidad “avanzando escalón por escalón”. Fue así como “la última materia”, con apariencia de “sueño”, derivó en un feliz despertar a este día, diploma en mano.

Bertolino lamentó el “contexto complejo” de la educación pública, que por la situación actual se ve “notablemente perjudicada”. Sin embargo, expresó un mensaje esperanzador ya que “la educación es una de las posibilidades más importantes para salir adelante como sociedad”. Alentó la continuidad de la “educación pública para todos sin distinción”, merced a la cual cada vez son más las familias en las cuales los hijos consiguen títulos universitarios que no habían podido obtener sus padres.

A sus pares graduados les adelantó: “Nos esperan muchos desafíos y un camino hermoso por recorrer” y los convidó a transitarlo de la mano de “valores” y con “compromiso” a fin de que “con el título que cada uno logró intentemos que esta sociedad sea un poquito más justa e igualitaria”.

Momentos después, el rector de la Universidad Nacional de Río Cuarto, Roberto Rovere, tomó juramento profesional a través del cual los egresados, de pie en sus lugares, expresaron su posición frente a la vida y su asunción inquebrantable de sumar sus saberes en pos de una mejor sociedad.

La de este viernes 17 de agosto fue otra colación en la que se vieron los frutos del programa Potenciar la Graduación, iniciado en 2016. Desde Secretaría Académica de la UNRC, vehiculizado a través de las facultades, el programa es una oportunidad de concluir sus estudios para todos aquellos a los que les falta menos del 30 por ciento y que, por cuestiones laborales, familiares o de otra índole, han discontinuado sus carreras. El trabajo conjunto de coordinadores de carreras y docentes ha generado condiciones para que aquello que se había dejado pendiente o atrás trocara en logro presente en busca de un satisfactorio futuro profesional.

Bérgamo: “Sigan defendiendo la educación pública”

Tras la entrega de diplomas, por las autoridades compartió un mensaje el profesor Enrique Bérgamo. Refirió a la crítica situación educativa, que motivó entre otras acciones el abrazo solidario a la UNRC el jueves 16, e instó a los flamantes profesionales a que, “desde su lugar de trabajo, sigan defendiendo la educación pública”, lo que despertó inmediatos aplausos.

Consciente de que “están apretados con los trajes, con los zapatos prestados, con la abuela a quien sacaron del pueblo hace seis horas”, el secretario general de la Universidad fue breve en sus palabras dirigidas “especialmente” a los graduados. “Va a quedar marcado que el día de su colación fue el 17 de agosto y me pareció oportuno recordar al general San Martín”, señaló.

Evocó al general San Martín “fuerte, al de las batallas y el de las ideas”, una de las cuales fue “seamos libres, lo demás no importa”. Otro aspecto de la vida del libertador que Bérgamo resaltó fue: “Primero es la soberanía, después es el comercio. Si no, nunca nos hubiéramos independizado de nadie”.

Al finalizar su discurso, manifestó una síntesis que se le atribuye al padre de la patria: “El rey nos decía que, si no teníamos para comprar leña, nos emponcháramos; que si no teníamos para alimentar el caballo, no lo tuviéramos; que si no teníamos suficiente comida, que comiéramos menos. Entonces, para hacer economía, nos deshicimos del rey”.

Pillón: “La educación es el arma más potente para cambiar el mundo”

Pillón agradeció a sus familiares por alentarlo a “no bajar los brazos” en los momentos difíciles de la carrera y “a la Universidad Nacional de Río Cuarto por la formación recibida”.

El flamante licenciado en Ciencias Biológicas recordó palabras de Nelson Mandela y dijo: “La educación es el arma más potente para cambiar el mundo, es el gran motor del desarrollo personal. Es la educación a través de la cual la hija de un campesino puede convertirse en médica, el hijo de un minero en jefe de la mina o el hijo de un trabajador agrícola llegar a ser el presidente de una gran nación”.

El graduado también hizo referencia al “momento difícil” por el que atraviesa la educación pública. Cuestionó: “A pesar de los más de 200 años que tenemos como nación y más de 400 desde que se fundó la primera universidad, hay personas que todavía no comprendieron la importancia que tiene la educación para un país y para su desarrollo”.

Pillón exhortó a sus compañeros profesionales a actuar “con ética y responsabilidad” y “al servicio de la sociedad”, pregonando “buenos valores para la vida y defendiendo siempre este modelo educativo con el que hemos sido privilegiados y que ha dado tantos profesionales de prestigio mundial”.

Enfatizó luego: “Necesitamos que la Universidad siga siendo pública, libre, gratuita y de calidad”, para que “cuando lleguen las próximas generaciones, con las mismas ilusiones y sueños con las que un día vinimos aquí, sigan encontrando en esta casa un lugar donde concretarlos”.

Finalmente, se despidió de sus compañeros graduados diciendo: “Tengamos presente que no siempre se pueden hacer grandes cosas, pero sí podemos hacer pequeñas cosas con gran amor, que es lo más importante”.

Después de las palabras de Pillón, el rector Rovere tomó el juramento de rigor a los egresados de la tarde. Siguió la entrega de los diplomas y, por último, las palabras del secretario general de la Universidad, que marcaron el final de una nueva colación. Con ella, ya son más de 22 mil los profesionales formados en las aulas de esta casa de estudios.

DIRECCIÓN DE PRENSA Y DIFUSIÓN

prensa@rec.unrc.edu.ar