Igualdad y equidad

UNRC: concluyó la redacción del Protocolo de acción contra la violencia y la discriminación de género

26 de Marzo de 2019 - Ahora será analizado por la Comisión de Interpretación y Reglamento del cuerpo colegiado. Contempla tres líneas fundamentales: la prevención, la atención de situaciones de violencia y la intervención. Además, garantiza la confidencialidad y la no revictimización de los denunciantes. Propone también la creación de un equipo de especialistas para atender los casos

El Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC concluyó la redacción del Protocolo de Acción Institucional para la atención, prevención e intervención ante situaciones de violencia y discriminación de género en el ámbito de esta casa de estudios.

El texto ahora será considerado por la Comisión de Interpretación y Reglamento del Consejo Superior.

Se trata de un conjunto de reglas que van a entender sobre situaciones de violencia de género y discriminación en la Universidad.

El Protocolo avanza en tres líneas fundamentales. Primero, la prevención, en donde se incorporan acciones que tienen que ver con la formación y la información en cuestiones de violencia de género. Segundo, la atención de estas situaciones cuando se produzcan. Y tercero, la intervención.

También, establece quiénes van a ser las autoridades de aplicación dentro del ámbito universitario, y garantiza la confidencialidad, la no revictimización, la diligencia y la celeridad en el tratamiento de cada situación, con un abordaje interdisciplinario.

En este marco, se propone la creación de un área sobre violencia de género y discriminación, donde a su vez funcionarán dos subáreas. Una integrada por un equipo técnico especializado para la atención de los casos de violencia, y la otra constituida por una comisión que acompañe los procesos en relación a la prevención y a la formación e información sobre la problemática.

Las reglas que fija el Protocolo serán aplicadas en todas las relaciones interpersonales, ya sean educativas o laborales tanto dentro del ámbito físico central de la Universidad (campus) como en todos los anexos y espacios donde funcionen actividades de la institución.

El Protocolo atenderá situaciones de violencia y discriminación basadas en el sexo o género de la persona, orientación sexual, identidad de género y expresión de género. Además, vivencias de la sexualidad que tengan por objeto o resultados excluir, restringir, limitar, degradar, ofender o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de los derechos.

También, contempla todas las normativas vigentes al respecto determinadas por el Código Penal Argentino, al igual que todos los hechos de connotación sexual, violencia física, psicológica, emocional o simbólica. Asimismo, considera las regulaciones establecidas por el Consejo Superior respecto de la violencia laboral.

Una universidad libre de discriminación

El objetivo de este Protocolo es lograr que la Universidad Nacional de Río Cuarto se constituya en un ambiente libre de discriminación de cualquier tipo y de hostigamiento y violencia por razones de identidad sexual, de género, que esté libre de acoso sexual y promueva condiciones de igualdad y de equidad.

La consejera superior docente Claudia Harrington, quien integra la Mesa Interinstitucional sobre Violencia de Género del Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC, destacó: “Con la aprobación de este Protocolo, vamos a estar dando cumplimiento a distintas instancias que nos han estado afectando y preocupando. En primer lugar, a situaciones de violencia de género que se están produciendo hacia el interior de la Universidad, de las cuales muchas veces no tenemos conocimiento porque no estamos al tanto de la normativa vigente. Esta es una cuestión que aparece muy fuerte en el resultado de las encuestas que realizamos sobre la temática a fines del año pasado. Las situaciones de violencia de género no necesariamente implican el golpe, sino que muchas veces son simbólicas o psicológicas, con las cuales convivimos cotidianamente”.

“Por otro lado, estamos cumpliendo con el compromiso asumido desde nuestra incorporación a la Red Universitaria por la Igualdad de Género y en contra de las Violencias, que es la disposición de protocolos en todas las universidades nacionales”, agregó la docente universitaria.

Harrington subrayó: “Este es el resultado del trabajo de distintas representaciones dentro de la Universidad, es decir los gremios, los distintos claustros y las autoridades, que asumieron un fuerte compromiso para el tratamiento de este tema”.

No obstante, la consejera superior docente advirtió: “El Protocolo no viene a solucionar nada, sino que nos da un marco legal para comenzar a trabajar. Nos queda un largo camino, que hemos tratado de encausar, en un principio, con este plan de acción, que abarca a la docencia, a la investigación y a la extensión. Pero requiere el compromiso de toda la institución, no solamente de las autoridades”.

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