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Ciencias
Naturales:
 Yerba
mate: estudian cómo
aumentar
la producción
Veterinaria:
 Parásitos
al galope
Biología:
 Terapia
fotodinámica, una herramienta
contra
el cáncer
Agronomía:
 ¿Quesos
ecológicos?
Educación:
 Estudiantes:
¿prisioneros
de la educación?
Comunicación:
 Internet
vs. identidades culturales
Historia:

La
violencia en el ámbito rural y urbano de
córdoba
entre 1750 y 1820
Agronomía:
 Nuevo
prototipo para siembra
directa
de granos finos
Educación:
 Buscando
nuevos modelos de gestión
Opiniones:
 Discusiones
abiertas
Economía:
 Las
PyMEs y el futuro del país y las regiones
Veterinaria:
 El
estado de salud de la glándula mamaria
y
calidad de la leche
Ingeniería:
 Un
sueño eléctrico
Comunicación:
 El
desafío del periodista científico
Universidad
Nacional de Río Cuarto
Rector:
Ing. Agr. Leonidas Cholaki Sobari
Vice-Rector:
Ing. Oscar Spada
Secretario
de Ciencia y Técnica:
Dr.
Jorge Anunziata
Proyecto
de Información Científica de la
Coordinación
de Comunicación Institucional
Editor:
Lic.
Miguel Angel Tréspidi
Coordinación:
Lic.
Deolinda Abate Daga /
Lic.
Sergio Martin
Realización:
Area
de Comunicaciones Externas,
Gráfica
y Fotografía.
Diseño
Web: Lic. Marcelo G. Ciani
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Una
tarea compleja, pero apasionante
“Sólo es ciencia
la ciencia transmisible”, sostuvo Leonardo Da Vinci para decir que “el
primer deber del hombre de ciencia es la comunicación”.
Acercar la ciencia al
público en general, trasladar a la sociedad sus avances y, en particular,
reflejar los trabajos de investigación que se realizan en la Universidad
Nacional de Río Cuarto (UNRC) es el desafío.
La comunicación
social se ha transformado en una herramienta de gran importancia en este
mundo, en el que el saber científico es vital para la vida cotidiana.
Las universidades nacionales
son las que aglutinan la mayor cantidad de investigaciones. En particular,
la UNRC en la actualidad se ubica entre las diez universidades nacionales
mejor posicionadas por su potencial en investigación.
Sin embargo, el esfuerzo
no es completo si no se logra conocer y comprender la realidad que construimos
en esta comunidad universitaria. Para ello, es necesario que las investigaciones
que aquí se realizan se conviertan en conocimientos para la comunidad.
Esa verdad que surge
en los laboratorios no puede ni debe quedar allí, por ello es que
desde la Universidad se pusieron las tecnologías de la comunicación
al servicio de la divulgación científica, como una vía
más por la cual hacer fluir el conocimiento hacia la sociedad.
La ciencia es una necesidad
básica que debe estar al alcance de la gente, por lo cual la divulgación
de esos saberes constituye una obligación.
La idea es que los científicos
locales puedan expresarse en voz alta, para explicar sus saberes y adelantos
conseguidos, alertar sobre posibles riesgos y aportar soluciones, a la
vez que expresar sus puntos de vista sobre los temas de interés
comunitario.
Mario Bunge dice que
“la realidad es complicada, pero no hay por qué complicar el discurso
sobre ella. A menos que se quiera hacer pasar lo trivial u oscuro por profundo
o refinado, imitando al vienés decadente que preguntaba: ¿a
qué hacerlo sencillo si se lo puede complicar?”.
En este aquí y
ahora, donde la ciencia y la tecnología cobran cada día más
importancia, la regla es simple: decirlo de la manera más clara
posible y para todos, lo cual no es nada nuevo, pues como sostiene Guadalupe
Zamarrón (México 1991), “la divulgación de la ciencia
no empieza, como se dice, en el siglo XVIII, sino en aquellos religiosos
trashumantes de la Alta Edad Media pregonado en las plazas y catedrales
los conocimientos de la ciencia griega y árabe”. |