Universidad Nacional de Río Cuarto

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Cuestionamiento

Piden que la Universidad haga un relevamiento sobre el servicio público de transporte

  21 de Marzo de 2023

La solicitud fue presentada en el Consejo Superior por los representantes estudiantiles. Cantidad de colectivos por día; franjas horarias en las que se utiliza el servicio; líneas que más se utilizan; tiempo de espera en los trasbordos; estado de unidades y garitas; aplicación; accesibilidad de las unidades, son los ítems que se demanda se tengan en cuenta. Los alumnos indicaron que el transporte público “obstaculiza, dificulta e impide el cumplimiento del derecho al acceso a la educación pública, laica, gratuita y de excelencia”

 

Los consejeros superiores estudiantes solicitaron que la UNRC haga un relevamiento de opinión en el ámbito de la comunidad universitaria sobre el servicio público de transporte.

El pedido fue presentado en la sesión de este martes del Consejo Superior por los consejeros Nicolás Muratore, Carla Smaldone, Ana Paula Anello Ortega y Alejo Rodríguez.

También demandaron un posicionamiento sobre la situación actual del transporte público urbano de la ciudad de Río Cuarto y que se apoye al documento presentado en la reunión de la mesa de trabajo del 15 de marzo último.

Lo hicieron a través de un escrito en el que solicitaron que el Consejo Superior y “la gestión general de la Universidad” “arbitre los medios necesarios para llevar a cabo un relevamiento sobre la opinión que la comunidad universitaria en su conjunto, incluyendo todos los claustros, posee sobre el servicio público de transporte, cuestión que responde a compromisos asumidos con la empresa de transporte, así como con el municipio en la última reunión conjunta de la mesa de trabajo referente a la presente problemática”.

Agregaron: “Creemos imprescindible que dicho relevamiento tenga en consideración los siguientes puntos: cantidad de colectivos por día (incluir transbordos); franjas horarias en las que se utiliza el servicio; líneas que más se utilizan; tiempo de espera en los trasbordos; estado de unidades y garitas; aplicación; accesibilidad de las unidades”.

“Así mismo solicitamos que este órgano se expida acerca de la situación actual del transporte público urbano de la ciudad de Río Cuarto y apoye el reclamo (documento) que los claustros de docentes, nodocentes, estudiantil y de graduados acercaron el día 15 de marzo en la reunión conjunta, al mismo tiempo que los futuros reclamos y/o actividades que se lleven a cabo como por ejemplo la presentación al Consejo Deliberante de la ciudad, entre otros”, manifestaron.

Siguieron: “El claustro estudiantil en su conjunto, al igual que los consejeros superiores nos ponemos a disposición para seguir reclamando y solicitando se cumplan las demandas de la comunidad universitaria en torno a un servicio de transporte público que obstaculiza, dificulta e impide el cumplimiento del derecho al acceso a la educación pública, laica, gratuita y de excelencia”.

Respuesta positiva del Consejo Superior

 

El cuerpo colegiado votó por unanimidad hacer un pronunciamiento y llevar adelante un relevamiento respecto de la satisfacción de la comunidad universitaria en cuanto al transporte de pasajeros.

También, se acordó mantener abierto el canal de diálogo que tiene lugar en el marco de la mesa de discusión que se viene llevando adelante en el campus, con la participación de los representantes de los distintos sectores de la Universidad y del Municipio, el Concejo Deliberante y la empresa concesionaria del transporte en la ciudad.

 

 

Carta abierta

 

A continuación, el documento presentado en la reunión de la mesa de trabajo del 15 de marzo:

 

temática: transporte 

¿Qué necesitamos y exigimos la comunidad universitaria de río cuarto?

La educación pública en Argentina en todos sus niveles es, desde hace muchísimos años, un derecho, ejemplo para el resto de los países; un derecho que permite a toda la ciudadanía acceder, permanecer y egresar de un sistema educativo con herramientas profesionales que se traducen en movilidad y ascenso social.

En este sentido, el acceso a la educación pública, laica, gratuita y de calidad no solo se garantiza dentro de los campus con buenas condiciones edilicias, innovación tecnológica o planes de estudios adecuados a los contextos, sino que también, y para que todo eso pueda desarrollarse de manera adecuada, es necesario que los estudiantes y los trabajadores de las instituciones educativas puedan llegar a las aulas, estudiar y habitar las instituciones educativas.

Es por eso que el sistema de transporte público necesita cubrir demandas y necesidades que permitan el acceso a la educación y por consiguiente el cumplimiento de un derecho. El actual sistema de transporte de la Ciudad de Río Cuarto no logra, aún después de largas discusiones y debates donde diferentes sectores que utilizan el sistema de colectivos han explicitado situaciones particulares y pedidos, cubrir esas demandas.

Actualmente nos encontramos con un sistema que, a pesar de los últimos cambios realizados por parte de la empresa y apoyados por el municipio local y de haberse presentado como una actualización e innovación que le permitiría no solo a la población beneficios sino a toda la ciudad una mayor fluidez, por el contrario, sólo logró obstaculizar y entorpecer aún más el camino de cada ciudadano a sus tareas particulares, entre ellas el acceso a las diferentes instituciones educativas.

El año 2023 comenzó con un nuevo sistema de transporte que se presentaba como solución a los problemas vivenciados durante muchos años; sin embargo, lo que se pudo constatar es que las paradas de colectivos se abarrotaron de estudiantes que se encontraban mareados luego de horas de espera, con recorridos y líneas modificadas, luego de haber realizado trasbordos y haberse tomado más de una unidad de colectivo para llegar a la universidad.

En el mismo sentido, muchos trabajadores de la universidad que no encontraron unidades que les permitieran llegar en sus horarios laborales, se vieron enfrentados a otras limitaciones (que por su barrio ya no pasan unidades, o pasan con mucha menor frecuencia, o menos líneas), por lo que se vieron en la obligación de buscar un medio de transporte alternativo para llegar a la universidad.

La comunidad universitaria, lamentablemente, debe un año más, exigir que nuestro derecho a la educación se respete de manera integral, es decir, dentro y fuera del campus, ya que además de estudiar y trabajar somos ciudadanos de esta ciudad. Es por ello que ser críticos del sistema de transporte no es un capricho sino una crítica constructiva que intenta hacer conocer de manera explícita nuestras necesidades, esperando que quienes deberían garantizar nuestro derecho a la educación, pero también una buena vida en nuestra ciudad puedan hacerlo.

Entendemos que el nuevo sistema de transporte público debería revisar los siguientes puntos:

Recorridos: los estudiantes llegan a la universidad y a las diferentes instituciones educativas desde distintos puntos/zonas de la ciudad, y el actual sistema de trasbordo, que no se encuentra coordinado en horarios ni en cantidad necesaria de unidades, hace imposible por momentos, que se puedan cumplir las actividades en tiempo y forma. Por ejemplo, los recorridos no tienen en cuenta la necesidad de acceso de estudiantes y de otros ciudadanos que viven en los barrios más alejados del centro, siempre ha quedado lejos la parada más cercana. Ésta falta de alcance de las líneas de la SAT dificulta tanto el acceso a la universidad, como el acceso al barrio por parte de estudiantes que desean realizar sus prácticas socio-comunitarias.

Horarios: las líneas presentan cada vez menos horarios en sus recorridos además de demostrar que los mismos no se encuentran planificados en relación a los horarios de actividades generales y educativas en los que la ciudad se desarrolla

Unidades: la cantidad de unidades de colectivo que actualmente recorren la ciudad, sobre todo, en horarios pico, demuestran ser insuficientes. Los estudiantes viajamos apretados e inseguros hasta las puertas de la universidad

Seguridad: la ciudad de Río Cuarto se ha vuelto más insegura para sus ciudadanos y el transporte no es un caso aparte, las garitas o lugares de espera de los colectivos que se encuentran poco iluminados se convierten en un lugar seguro para la inseguridad

Accesibilidad: son pocas las unidades que se encuentran pensadas y planificadas para permitir condiciones de accesibilidad que justamente cumplan con las necesidades de los usuarios del transporte.

App: la innovación tecnológica debería facilitar el conocimiento de la información necesaria para una buena utilización del servicio, en su lugar, nos encontramos con una aplicación que no tiene actualizados ni horarios ni recorridos.

BEG: El Boleto Educativo Gratuito es nuestro derecho y se encuentra inevitablemente complementado con el derecho a una educación libre y gratuita; pero, al pasar de los años, estos derechos nunca han sido garantizados durante el mes de febrero. Es durante este mes cuando realmente comienza la actividad universitaria para estudiantes, aspirantes a alumnos, docentes, no docentes y graduados. En febrero, los estudiantes seguimos viniendo a la universidad, ya sea a rendir, a clases de consulta, a hacer uso de la biblioteca y el comedor, a participar de las actividades del ingreso, etc. Los ingresantes, por otra parte, cursan durante todo el mes, sin embargo, se nos niega el derecho al BEG durante este período.

Esto dificulta las posibilidades de arribar y habitar la Universidad Pública, permitiendo el acceso solo a quienes puedan costear los boletos, considerando que hoy el boleto urbano se encuentra en $85 (lo que suma $170 en un día) y que muchos estudiantes que no son de la ciudad tienen que costear también el boleto interurbano.

Esta no puede ser la situación de todos los comienzos de años, donde, en relación a su capacidad económica algunos sí pueden y otros no, llegar a la Universidad Pública. Por ello, consideramos que el Boleto Educativo Gratuito debe ser garantizado para todos y durante todas las etapas de cursado.

Por todo lo anterior es que los miembros de la comunidad universitaria decimos basta a un sistema de transporte que obstaculiza nuestro derecho al acceso, permanencia y egreso a la universidad y que parece no encontrarse en consonancia con el derecho a la educación pública.

Los miembros de la comunidad universitaria defenderemos y exigiremos el cumplimiento de nuestras demandas no solo como integrantes de todos los claustros de la universidad sino como ciudadanos de Río Cuarto.

 

 

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